lunes, 19 de octubre de 2015

Tres veces te engañé

Capítulo 4. ¿Y después de esas tres veces?


De todas las cosas que uno puede perdonar en una relación la Infidelidad es la más difícil de ellas, pero bien dice la canción "Es fácil perdonar cuando se quiere de veras" entonces ¿será Heero capaz de perdonar a Duo su infidelidad con Trowa? Tal vez pero ¿y su infidelidad con Quatre? ¿y qué hay de Wufei? Cada persona tiene su forma de perdonar, hay personas que son capaces no solo de perdonar sino también de olvidar, pero también hay personas que perdonan pero jamás logran olvidar ¿cuál de esas dos será Heero?

Una tarde gris... no paraba de llover, Heero viendo a través de su ventana la lluvia caer y no pudiendo sacar de su mente aquella imagen, la imagen de Duo entregándose sin inhibiciones a Trowa, la imagen de su trenzado sumido en el más exquisito de los placeres, su Duo con otro, con otro que se hacía llamar su amigo, con otro a quien no tenía más deseos que romperle la cara, con otro que no lo amaba como él, porque Heero amaba a Duo, y lo amaba bien, no se merecía ninguna clase de engaño porque él si había sabido entregarlo todo, porque él si sabía lo que era amar y entregar el alma, porque el Heero Yuyo que hace años peleaba al lado de su siempre amigo Gundam ya no existía, porque éste Heero era un Heero pasivo, un Heero que se había enamorado, un Heero que incluso rodaba sus lágrimas sumido en pensamientos que le destruían, porque incluso el amargo sabor de tantas muertes y peleas durante la guerra no se podía comparar con el amargo sabor de saber a Duo en brazos de otro

Heero. ¿Por qué me hiciste esto Duo?

El trenzado no la pasaba mejor, también sufría, y sufría mucho, nunca antes había sabido el significado de la palabra arrepentimiento, nunca antes se había sentido tan solo y derrotado entonces ¿por qué lo había hecho ¿por qué se había acostado con otros amando tanto a Heero y sobre todo sabiendo que el ex soldado perfecto también le amaba ¿por qué? pero es bien sabido desde tiempos remotos que la única especie sobre la faz de la tierra capaz de semejante estupidez es el ser humano, porque el ser humano es el único que tiene el gran defecto de no medir las consecuencias de sus actos, y Duo había sido una víctima más de la terrible realidad que es ser un ser humano

Duo. Que idiota fui ¿por qué le hice esto a mi Hee-chan?
Hilde. Con hablar así y darte de topes en la pared no ganas nada, habla con él
Duo. No puedo, él me odia, va a matarme en cuanto me vea
Hilde. No sigas tonterías, ese hombre te ama, lo sabes
Duo. Por lo mismo, si no me amara se lo tomaría a la ligera y no le hubiera hecho tanto mal
Hilde. Eso sí ¿entonces piensas dejar las cosas así y que más nunca se vuelvan a ver?
Duo. Tal vez
Hilde. ¡Si serás idiota Duo, ve y búscalo ahora mismo!
Duo. Pero Hilde...
Hilde. Nada de peros idiota trenzado de pacotilla, levanta tu apestoso trasero de mi silla y busca el perdón de Heero
Duo. Pero...
Hilde. ¡Que vayas!
Duo. Está bien, pero antes tengo cosas que arreglar

El trenzado opta por hacer caso a su amiga y sale apurado del departamento de la chica rumbo a L5, colonia donde vivía su amigo Wufei, debía desde un principio arreglar las cosas antes de ir en busca de Heero y como primera escala tenía a Wufei ya que con él había comenzado todo... el chino sin esperar la visita de su amigo se impacta al verlo parado en la puerta y a la vez se alegra, si en aquella ocasión Duo iba con las intenciones como en la otra ocasión entonces él se sentía feliz de semejante visita

Wufei. ¿Por qué andas por acá?
Duo. Si quieres me voy
Wufei. Nada de eso Duo, quédate
Duo. Ejem... ¿ya me hablas por mi nombre?
Wufei. Desde aquel día ¿recuerdas?

Ante el recordatorio hasta las orejas de Duo ardían en calor, tan solo de acordarse le hacía hervir la sangre, aquel día había conocido una faceta de su amigo que nunca jamás creyó que iba a conocer, el chino en cambio cerraba el ojo a Duo tras acordarse de aquel bello día, para Wufei, claro...

Duo. Respecto a eso, creo que nunca dejamos las cosas en claro
Wufei. ¿De qué hablas?
Duo. De que jamás volverá a suceder Wufei, jamás
Wufei. Eso dices ahorita
Duo. No Wufei, en verdad nunca sucederá

Wufei baja su cabeza al escuchar la voz tan firme y decidida de Duo y él en cambio sintiéndose mal por su amigo se acerca a él y de rodillas al frente del chino le toma las manos, Wufei levanta su mirada y ambos chicos se miran a los ojos

Duo. Perdóname Wufei, sabes que amo a Heero, nunca debí haberme acostado contigo
Wufei. ¿Y porque lo hiciste? Sabes que te quiero
Duo. Lo sé y en verdad me siento halagado de ocupar un lugar especial en tu corazón, pero en el mío lo ocupa Heero ¿comprendes?
Wufei. Dime la verdad Duo ¿por qué te acostaste conmigo?
Duo. Saberlo te dolerá
Wufei. Dime, cuéntame todo

El ex piloto 05 escuchaba atento toda la historia de Duo ¿se sentía molesto? ¿se sentía triste? ¿se sentía desilusionado? Si, se sentía así y mucho peor, Duo había sido demasiado cruel al acostarse con él tan solo por venganza, y además de todo una venganza mal infundada, porque la certeza de que Heero lo engañaba con Relena nunca la había tenido, pero aun así enfadarse y hacer algo contra Duo no le iba a ayudar en nada, ni a sentirse mejor ni a hacer que Duo lo quisiera a él, en un principio se había arrepentido de decirle que luchara por Heero, en un principio deseaba ir a L2 en su busca, en un principio habría creído que Duo era el amor de su vida y que debía luchar por el contra todo y todos, pero había recapacitado y había entendido que Duo jamás lo iba a querer a él como quería a Heero, lo mejor era tratar de comprender

Duo. ¿Podrás perdonarme?
Wufei. Me duele que me hayas utilizado
Duo. Lo sé, soy una persona horrible
Wufei. Sí, lo eres
Duo. ...
Wufei. Aun así te amo, pero sé que no eres para mí
Duo. ¿Entonces me perdonas?
Wufei. Si Duo, pero entiende algo, ya no somos amigos
Duo. Pero Wufei...
Wufei. Sht, déjame terminar... no solo ya no somos amigos, tampoco quiero volverte a ver
Duo. ¿No dijiste que me habías perdonado?
Wufei. Sí, y lo sostengo, te perdono, pero jamás podré volver a verte y no pensar en lo que me hiciste, yo no sé olvidar
Duo. Entiendo, espero algún día cambies de opinión
Wufei. No lo haré
Duo. ...
Wufei. Adiós Duo, que seas feliz con Heero

Wufei se pone de pie, se acerca a la puerta y abriéndola le indica a Duo el camino, el trenzado aún seguía de rodillas frente al sillón donde estaba Wufei y al ver la puerta abierta se pone también de pie, se acerca a ella y queda frente a frente con Wufei, ambos chicos se miran seriamente y Duo con los ojos cristalinos se va corriendo de ahí, Wufei cierra la puerta tras la partida de Duo y recargando su cabeza en la puerta comienza a llorar, un llanto silencioso, tan solo lágrimas, no necesitaba más, porque Duo no merecía siquiera eso
La siguiente escala en el viaje de Duo rumbo al perdón de Heero se encontraba en la colonia L4 donde Quatre vivía, aquel chico al que le había quitado la virginidad, aquel chico que se había entregado a él con amor al igual que Wufei lo había hecho suyo, a diferencia de cómo había sucedido con Trowa, cuyas hormonas de chico adolescente les habían dominado y donde ninguna clase de emoción o sentimiento se había presentado... Quatre tampoco esperaba la visita de Duo pero su presencia era por demás muy grata, porque no había día en que el rubio no pensara en Duo desde aquella vez que ambos se habían entregado, aquella vez en la que como nunca se había sentido deseado, porque Duo le había visto con deseo, no era como Trowa, porque el ex piloto de Heavyarms le trataba como un pequeño, porque nunca lo había visto como objeto de deseo como lo había hecho Duo, porque Duo lo había hecho sentirse deseado y amado... que cruda realidad estaba a punto de enfrentar

Quatre. Me da mucho gusto verte Duo
Duo. A mí también
Quatre. ¿Volviste con Heero?
Duo. Estamos separados
Quatre. Ya veo...
Duo. ¿Es mi imaginación o sonreíste?
Quatre. ¿Yo? para nada
Duo. Quatre, vengo a hablar contigo y muy seguramente no te gustará oír lo que voy a decirte, pero tengo que hacerlo
Quatre. ¿Es algo malo?
Duo. Si, vas a odiarme
Quatre. Yo jamás podré odiarte... mi Duo

El trenzado no daba crédito a lo que sucedía, Quatre se había acercado a él y se había sentado a su lado, recargando su cabeza sobre su pecho, abrazándolo por la cintura, ese chico sí que lo amaba, y había osado llamarlo "su Duo", ahora sí que como nunca se sentía arrepentido y además de todo ruin y sucio, en cambio el rubio ignorando todo lo que había estado detrás de su primera vez quería mucho a Duo y ahora que este le decía que ya no estaba con Heero más le quería, porque ahora sí tenía una oportunidad con él

Duo. Espera Quatre, estas malentendiendo las cosas
Quatre. Quiero que vuelva a suceder
Duo. ¿Qué? ¿De qué me hablas?
Quatre. Ya sabes... quiero... quiero que... me hagas el amor

Nuevamente las orejas de Duo estaban ardiendo, Quatre le pedía directamente que lo hiciera suyo, le pedía que le hiciera el amor, nunca antes había sentido un estremecimiento como el que le embargaba en esos momentos, además de la culpabilidad, Quatre también estaba sonrojado, además de nervioso... Duo agarra a Quatre de los hombros y lo aparta de él delicadamente, Quatre cierra sus ojos creyendo que el siguiente paso del trenzado será besarlo pero en la espera abre sus ojos topándose con los de Duo que le miran tiernamente

Quatre. ¿Qué pasa?
Duo. Lo siento Quatre, yo no te volveré a hacer el amor, es más, nunca te he hecho el amor
Quatre. Ya sé que no me amas y que aquella vez tampoco lo hiciste por amor pero eso no me importa ahora, te amo y tú has terminado con Heero ¿por qué no nos damos una oportunidad? Tal vez resulte, no como me sucedió con Trowa
Duo. No Quatre, yo pienso recuperar a Heero, además estoy seguro que en cuanto oigas lo que tengo que decirte vas a odiarme
Quatre. Yo ya te dije que nada hará que te odie
Duo. Sé que me odiarás porque lo que voy a decirte no solo tiene que ver con lo que sucedió entre nosotros el otro día sino también con Trowa
Quatre. ¿Qué tiene Trowa que ver en todo esto?
Duo. Verás

Duo contaba a Quatre todo lo que había sucedido con Trowa y los motivos por los que se había acostado con él, Quatre oía todo lo que Duo le contaba hasta el final, sin interrumpirlo, enojarse o comenzar a llorar, se veía incluso tranquilo y atento a la plática, Duo al terminar se queda estático observándolo en espera de una reacción por parte de Quatre pero todo lo que hace el rubio es comenzar a reír a carcajadas ante la mirada atónita e incrédula de Duo

Duo. ¿Qué es lo gracioso?
Quatre. De verdad que te pasas Duo
Duo. ¿Por qué?
Quatre. Mira que inventar todas esas cosas horribles para alejarme, mejor solo dime que no quieres y ya
Duo. ¿De qué hablas?
Quatre. Eres incapaz de hacerme algo tan espantoso, sería horrible de tu parte
Duo. Quatre...
Quatre. Porque somos amigos, y los amigos no se hacen esas cosas
Duo. Escúchame Quatre...
Quatre. Dime que no es verdad
Duo. Yo...
Quatre. Dime que es una broma
Duo. Por favor Quatre...
Quatre. ¡Dime que es mentira!

El rubio sonreía pero sus ojos estaban muertos, cubiertos de lágrimas, Duo le había hecho algo horrible y él no lo podía soportar, se había entregado al hombre más cruel creyendo que lo quería, creyendo que lo deseaba bien, creyendo que se preocupaba por él, pero la realidad es que solo lo había hecho por coraje, por venganza, por hacerle daño a una persona y en cambio había destruido a dos, él y Heero

Duo. Quatre...
Quatre. ¡Vete de mi casa... lárgate!
Duo. Por favor no me odies
Quatre. ¡¿Qué no te odie?!... ¿quieres que te siga amando? ¿Eso quieres?
Duo. No, solo perdóname
Quatre. No Duo, ni te perdono ni olvido lo que me has hecho, nunca antes me sentí tan decepcionado de alguien
Duo. Quatre...
Quatre. También Trowa me ha decepcionado ¡pero tú más! Y a ti no te quiero volver a ver
Duo. Está bien, me iré... pero en verdad me odio a mí mismo más de lo que tú me odias, eso te lo puedo garantizar
Quatre. No me importa... ahora vete porque has perdido a un amigo

Sin nada más que decir Duo sale con la cabeza baja de la casa de Quatre, el rubio sí que lo odiaba y él no lo culpaba, porque él era culpable de todos los cargos que se le imputaban, el rubio tras la partida de Duo comienza a llorar tristemente, cayendo de rodillas y abrazándose así mismo, sintiéndose enormemente estúpido por creer que Duo le quería, y más aún por seguir amándole...
Última parada antes del destino final: colonia L3

Duo. Gracias por recibirme
Trowa. Qué más da
Duo. Supongo que también me odias
Trowa. ¿También? ¿eso quiere decir que Heero ya lo sabe?
Duo. Nos vio Trowa
Trowa...
Duo. Pero también me refería a Quatre
Trowa. Lo felicito
Duo. Por favor Trowa, a ti también te odia
Trowa. ¿Le contaste lo que sucedió con nosotros?
Duo. ¿No debía?
Trowa. Tienes razón... ¿a qué has venido? ¿por más sexo?
Duo. No, a pedirte perdón
Trowa. ¿A mí por qué?
Duo. Por lo de Quatre
Trowa. Qué más da, ya no éramos nada, además yo le hice lo mismo a Heero, me lo merecía ¿no crees?
Duo. No Trowa, lo que hicimos está mal
Trowa. Lo sé
Duo. ¿Nosotros si seguiremos siendo amigos?
Trowa. Lo dudo, a ti Heero te va a perdonar, lo sé porque te ama, pero a mí jamás me va a perdonar lo que le hice
Duo. ¿Y?
Trowa. Si vuelven obviamente me querrá a kilómetros lejos de ti, así jamás podremos seguir siendo amigos
Duo. Eso es verdad
Trowa. Además me costará trabajo verte y no recordar aquella noche
Duo. Trowa...
Trowa. Ya que...
Duo. ¿Por qué no luchas por Quatre?  Te sigue queriendo, algo me lo dice
Trowa. Tal vez, pero ambos tuvimos que ver contigo, y lo creas o no siento resentimiento hacia él, te entregó fácilmente algo que a mí no, y eso duele
Duo. Está bien, yo ya me voy
Trowa. Suerte con Heero
Duo. Suerte con Quatre

Un apretón de manos, es todo lo que iban a darse ahora, que gran diferencia a aquella noche... por fin la última parada de Duo, la casa de Heero, debía respirar hondo y estarse tranquilo, estaba a punto de hacer algo muy importante y que definiría el resto de su vida, el trenzado llega hasta el departamento de Heero y adentro se escuchan unas voces, una la reconocía bien, se trataba de Heero ¿pero y la otra? ¿la de una mujer? Sí, pero no cualquier mujer ¡la de Relena!

Relena. ¡Algún día tienes que salir de éste agujero!
Heero. No quiero... déjame en paz
Relena. Yo te ofrezco todo, amor, dinero, buena vida... hijos
Heero. No los quiero
Relena. ¡Por favor Heero, yo te amo!
Heero. Pero yo a ti no
Relena. Lo sé pero puedes intentarlo
Heero. El amor no es así, no se "intenta" amar a alguien
Relena. … él se acostó con otro, y no cualquier otro, uno de tus mejores amigos
Heero. Ese cirquero pedazo de porquería no es mi amigo
Relena. Por favor mi amor

La chica tan seductora como pretendía se acerca a Heero e intenta besarlo pero él le voltea la cara apoyando su mano en el rostro de la chica y alejándola de él

Heero. Vete
Relena. Heero...
Heero. Si no hubieras aparecido en mi vida todo estaría bien
Relena. Que cosa tan horrible me dices
Heero. ¿Horrible?... horrible como me siento en éste momento, sin el baka trenzado
Relena. Que patético eres, débil y estúpido por un hombre
Heero. ¿Si fuera por una mujer no lo seria?
Relena. Lo sería menos ¿pero por otro hombre? ¿y además de eso un cualquiera?
Heero. No vuelvas a decirle así
Relena. ¿Y cómo le digo? Por Dios, te pintó el cuerno cruelmente, es un puerco

Ahora enfadado Heero se acerca a la mujer y sujetándola fuertemente de la barbilla la encamina hacia la puerta sacándola de un ligero empujón, Heero seguía siendo caballeroso a pesar de todo y no le iba a hacer daño, Relena una vez fuera del departamento maldice a Heero y muy enojada se va, Duo se encontraba escondido atrás de un pilar y no es visto por ninguno de los dos, había logrado oír parte de la conversación, Heero cierra la puerta de su departamento y Duo sale de su escondite con una sonrisa de oreja a oreja

Duo. Me defendió, eso me da una esperanza

Muy decidido Duo toca a la puerta del departamento y Heero tarda en abrir no más de dos minutos, el ex soldado perfecto mira a un Duo parado frente a su puerta, se veía tan hermoso como siempre pero le miraba fríamente, Duo también le miraba, en sus ojos se podía ver el deseo que tenía de verlo, pero Heero cierra enseguida la puerta casi en las narices de Duo sin darle tiempo siquiera de decir Hola, Duo se entristece pero en lugar de irse vuelve a llamar a la puerta pero sin resultado, y así pasan dos horas más, cada 5 minutos Duo tocaba y Heero lo ignoraba, el trenzado ya estaba a punto de dormirse, se encontraba sentado en el suelo y Heero no se apiadaba de él, también se encontraba sentado frente a la puerta pero del otro lado, por dentro del departamento

Duo. Sé que estás ahí, cerca... sé que no quieres verme, que me odias, pero aprovechando que estoy tan cerca voy a decirte todo lo que siento, todo, desde un principio, tienes preguntas y mereces respuestas, yo te las daré

Heero escucha a Duo y se acerca más a la puerta, Duo ve la sombra de Heero por debajo de la puerta y mete sus dedos quedando estos por dentro del departamento, Heero los ve del otro lado e intenta tocarlos pero antes de que pueda hacerlo retira rápidamente su mano, primero debía escuchar a Duo y después juzgar

Duo. ¿Sabes? hay un momento en la vida de todas las personas en que nos preguntamos si lo que estamos viviendo es lo que queremos, ese día me llegó, me sentía extraño, teniendo una relación formal, teniendo algo que hasta hace poco solo podía soñar, teniendo alguien que me amara y alguien a quien amar, jamás dudé de mi amor por ti pero me preguntaba ¿estar solo a tú lado es lo que quiero? Me diste mi primer beso, fuiste el primero con quien estuve en la intimidad, y fui feliz, te lo juro pero, algo no estaba bien, nunca supe lo que era ser un adolescente normal, con muchas relaciones vanas, tan solo de repente comencé a vivir una vida adulta y eso me asustó, sentí que me había saltado una parte importante de mi vida, tan solo... quería saber lo que era ser un idiota adolescente que no mide la consecuencia de sus actos, que hace las cosas por instinto dejando de lado la razón, mis celos no fueron más que un medio para lograr ese fin, pero... ahora sé que estaba equivocado, porque soy demasiado afortunado de tener a alguien como tú, que me ama y que a pesar de lo que hice está del otro lado de la puerta escuchándome pacientemente y en silencio, de verdad que me saqué la lotería contigo
Heero. Duo...
Duo. No merezco que me estés oyendo, porque hay algo que tú no sabes
Heero. Dímelo ¿qué puede ser peor?
Duo. No fue solo Trowa...

Heero se queda totalmente callado del otro lado de la puerta mientras que Duo se pone de pie al sentir que Heero también se pone de pie, el silencio se alarga diez minutos y Duo se preocupa al no escuchar nada proveniente de adentro del departamento

Duo. ¿Heero?... Heero ábreme... Heero ¿qué estás haciendo?... Heero, no hagas tonterías

Por más que insistiera Duo no obtenía respuesta de Heero y ya estaba muy preocupado, el chico de ojos cobalto era capaz de cometer alguna tontería y él jamás se lo iba a poder perdonar

Duo. ¡Heero!... por favor ábreme, si quieres golpearme hazlo, véngate de mí, hazme lo que quieras pero por favor no hagas nada malo contra ti ¡Abre!

El trenzado se deja caer de rodillas al suelo apoyando su mano en la puerta y llorando con fuerza, Heero seguía sin responder y él ya se imaginaba lo peor, Duo comienza a golpear con fuerza la puerta hasta que ésta comienza a abrirse dejando ver la figura de Heero con una expresión de odio, miraba fríamente a Duo pero él estaba feliz de ver con bien a Heero aunque en sus ojos se podía ver el rastro de lo que había sido un llanto, Heero había llorado en silencio pero ahora estaba normal

Heero. ¿Creíste que me suicidaría? ¿Crees que mereces que me suicide por ti? No vales tanto baka
Duo. Tienes razón, no valgo eso
Heero. Levántate y entra

Duo se sorprende de la forma con que la que Heero se estaba manifestando, sin duda era aún más preocupante que verlo totalmente furioso pero sin desconfianza se pone de pie y entra al departamento, Heero voltea a ambos lados del pasillo y después cierra la puerta colocándole enseguida el seguro, Duo tímido como nunca entra mirando el departamento, éste se encontraba en malas condiciones, los mismos trastes que habían estado sucios la noche que él se fue seguían ahí sin lavarse, el piso al igual que los muebles se veían llenos de polvo y las ventanas estaban cerradas, Heero señala a Duo la habitación en señal de que entre y Duo pasando saliva entra dudoso, la habitación seguía igual a como la había dejado, estaba todo tirado, los pedazos de espejo aún en el suelo al igual que una botella de licor, Heero no estaba muy diferente, aún vestía la misma ropa y su cabello se veía más despeinado de lo normal

Duo. Todo está...
Heero. Igual... no me importa
Duo. Heero, yo sé que...
Heero. ¿Te gusta el sexo Duo?
Duo. ¿Qué?
Heero. ¿Eres adicto al sexo?
Duo. No Heero
Heero. ¿Quiénes fueron?
Duo. Pues...
Heero. ¡Contéstame!
Duo. Wu... Wufei y... Quatre

Heero frunce el ceño y empuña con fuerza sus manos al escuchar ambos nombres, ahora estaba más que convencido de que jamás había tenido amigos

Duo. Sé que suena imposible pero ¿me aceptarás de nuevo a tu lado?
Heero. No lo sé
Duo. ¿Qué puedo hacer para que me perdones?
Heero. ¿Perdonarte? ¿Quién dice que voy a perdonarte?
Duo. Pero...
Heero. No puedo perdonar algo que hiciste con dolo, si solamente hubiera sido un error
Duo. ¡Fue un error!... y me arrepiento, te juro que me arrepiento
Heero. Pensaba perdonarte cuando aún sabía que solo había sido Trowa... pero ahora...
Duo. Sin ti me voy a morir Heero, por favor
Heero. ¿Y crees que yo aún sigo con vida?
Duo. ...
Heero. Vete de aquí, me da asco verte
Duo. No por favor
Heero. Vete y no vuelvas nunca
Duo. ¡No me iré!
Heero. Duo...
Duo. ¡Te amo y no me iré! la primera vez que me corriste fui débil y hui pero ahora no lo haré ¿entendiste?

Los ojos de Heero estaban muy abiertos, en los de Duo había fuego, un fuego que jamás había visto en ellos, Duo se acerca a Heero y colocando ambas manos en el rostro del chico intenta besarlo pero Heero voltea la cara y sujetando los brazos de Duo los aparta de su rostro

Heero. ¿Cómo puede alguien que ama hacerle tanto daño a esa persona?
Duo. No hay razón, solo sucedió
Heero. ¿Cómo pretendes que te haga el amor sabiendo que también ellos estuvieron adentro de ti? ¿qué aún tienes su esencia?
Duo. ¿No me perdonarás?
Heero. Si tan solo... pudiera borrar todo rastro de ellos en ti
Duo. Hazlo

Duo se aleja de Heero y comienza a quitarse la camiseta, el ex piloto 01 mira a Duo detenidamente cuando él se quita prenda por prenda hasta quedar desvestido completamente, dejando ver su siempre hermoso cuerpo, Heero se acerca a Duo y lo mira fijamente a los ojos, lleva su mano al rostro del trenzado y le hace una caricia, Duo cierra los ojos y agarra la mano de Heero

Heero. ¿Trowa te beso aquí?

Pregunta Heero a Duo mientras con la otra mano acaricia el estómago de Duo, el trenzado niega con la cabeza y agarra la mano de Heero para llevarla hasta su miembro, Heero aprisiona el miembro de Duo con su mano y lo acaricia

Heero. ¿Aquí?

Vuelve a preguntar, ésta vez Duo afirma con una voz entrecortada, Heero deja de acariciar el rostro de Duo y se hinca frente a él tomando el miembro del trenzado con la otra mano y dándole un tierno beso bajando hasta los testículos con la lengua y volviendo a subir hasta besar nuevamente la punta, Duo se mordía los labios, Heero se pone de pie y acerca sus labios hacia la oreja de Duo

Heero. ¿A Wufei le gusto morderte aquí?

Antes de que Duo pueda contestar algo Heero muerde la oreja de Duo en la cual deja la marca de sus dientes, Duo empuña sus ojos pues siente un poco de dolor, Heero en cambio le mira fríamente y llevando su mano hasta los glúteos de Duo lo acaricia para después deslizar su dedo índice en medio separando los glúteos del trenzado quien jadea al sentir el dedo de Heero

Heero. ¿Estuvo Quatre aquí?

Pregunta con un tono de molestia y Duo niega con la cabeza, Heero saca su dedo y se aleja de Duo comenzando a desvestirse, Duo abre sus ojos observando a Heero con detenimiento, en su rostro se podía ver aún el enfado

Duo. Heero... ¿qué vas a...?

Heero no deja terminar a Duo pues se acerca a él y abrazándolo con fuerza lo besa duramente en los labios hasta hacer presión con los dientes, Duo abre sus ojos con fuerza y ve que de los ojos de Heero salen un par de lágrimas y él también comienza a llorar, besándose aún con pasión Heero acerca a Duo hasta la cama y separando sus labios de los del trenzado lo avienta a la cama con fuerza, Duo cierra los ojos al sentir el impacto y cuando los abre ve en los ojos de Heero mucho odio, ahora si estaba preocupado

Heero. ¿Qué haré? Tú mismo me permitiste borrar el rastro que ellos habían dejado

Duo pasa saliva duramente y sus manos comienzan a temblar, Heero se acerca a la cama paso a paso, lentamente, se hinca sobre ella y avanza hacia Duo que estaba acostado apoyándose con ambos codos sobre la cama, se inclina hacia él y lo besa con pasión, Duo cerrando sus ojos corresponde al beso, Heero se separa bruscamente y agarrando ambas rodillas de Duo le abre con un movimiento rápido las piernas las cuales se encontraban flexionadas, Duo se queja ante el movimiento cerrando un ojo mientras con el otro observa a Heero, nunca antes lo había visto con tanto deseo

Heero. Entraré en ti cuantas veces sea necesario para borrar el rastro de esos malditos, y entonces ahora sí serás solo mío
Duo. Si Heero, acepto el castigo
Heero. ¿Es un castigo para ti que yo entre muchas veces?
Duo. No, pero lo harás con fuerza, lo sé
Heero. ¿Qué acaso no te gusta el sexo duro?
Duo. ...
Heero. Trowa fue algo violento ¿no?
Duo. Ya Heero, termina con esto

Heero se acerca nuevamente a Duo y agarrando su propio miembro entra rápidamente en él con un movimiento rápido y fuerte, Duo al sentir el miembro de Heero entrar violentamente hasta topar exhala un pequeño grito empuñando a la vez los ojos, Heero se queda dentro sin moverse hasta que Duo abre sus ojos y ambos se miran

Duo. Hazlo

Duo agarra con fuerza las sábanas preparándose para lo que viene, Heero sujeta con fuerza la cadera de Duo con su mano derecha y con la izquierda agarra el miembro de Duo entonces sale un poco de él para luego entrar nuevamente con fuerza, las embestidas de Heero eran violentas y al estar masturbando a Duo también lo hacía con fuerza apretando el miembro del trenzado y jalándolo, Duo apretaba con mucha fuerza sus ojos gimiendo con fuerza, gemidos combinados con gritos, unas lágrimas salían de sus ojos, nunca antes había sentido tanto dolor, Heero se movía con vaivenes rápidos y sensuales a la vez que movía las caderas de Duo, el trenzado no puede más y antes de que Heero culmine lo hace el primero, su semen moja completamente su vientre y parte de su pecho, ahora se sentía un poco aliviado pero aún Heero se movía con fuerza entrando y saliendo de él, el miembro de Duo se movía con rapidez al ritmo de las embestidas ahora que ya había culminado pero Heero lo agarra nuevamente comenzando a acariciarlo intentando provocar en Duo otra erección pero sin lograrlo y entonces por fin culmina dentro de Duo quien gime al sentir el cálido líquido dentro de él pero Heero no sale de él, Duo deja de flexionar sus piernas bajándolas hasta quedar sobre la cama y entonces Heero sale lentamente de él cayendo enseguida sobre su pecho, ambos estaban muy agitados y respiraban con dificultad

Heero. ¿Lo sientes? Trowa ya no está en ti
Duo. Sí, puedo sentirlo

Ambos se toman de las manos y comienzan a besarse con pasión, los dos quedan abrazados un par de minutos, ahora ya estaban listos para lo que venía, Heero se baja de Duo y agarrándolo de los hombros le indica que se hinque, los dos quedan frente a frente y se besan, la mano de Heero baja hasta tomar el miembro de Duo y comienza a acariciarlo, a su vez Duo toma el de Heero y hace lo mismo, ya que ambos han conseguido una erección Heero lleva a Duo hasta la cabecera de la cama, agarra ambas manos del chico y las lleva hacia los barrotes, Duo los sujeta con fuerza y separa sus piernas, Heero primero mete un dedo y comienza a moverlo dentro de Duo quien gime despacito, un segundo dedo invade a Duo y él se muerde el labio inferior al sentirlo moverse, explorándolo totalmente, Heero saca sus dedos y con su otra mano agarra su miembro introduciéndolo en Duo, ésta vez sin tanta fuerza pero sí de un solo movimiento hasta que sus testículos chocan con los glúteos de Duo,

La mano de Heero va hacia el rostro de Duo y lleva los dos dedos que había introducido hasta meterlos ahora en la boca de Duo quien comienza a lamerlos, Heero comienza con las embestidas, igual de rápidas pero sin tanta fuerza, ahora el placer ganaba al dolor, una vez que Duo limpia totalmente los dedos de Heero éste lleva su mano hacia el miembro de Duo comenzando a acariciarlo, sujetando de cuando en cuando sus testículos y también acariciándolos, Duo gemía completamente de placer, y volteando hacia atrás se encuentra con los labios de Heero, ambos jugaban sus lenguas cuando se separaban para tomar aire, Heero desciende por el cuello de Duo el cual lame y besa aumentando la velocidad de sus embestidas, Duo también movía sus caderas provocando mayor placer, ya Heero había encontrado su punto más sensible y él trataba de que el miembro de Heero tocara siempre ahí, los gemidos de ambos eran fuertes y rápidos, estaban a punto de llegar al clímax

Heero. Mhg... ¿Así fue... con Wufei?

Preguntaba Heero entre gemidos mordiendo después el hombro de Duo, pero él no le contesta, tan solo un par de lágrimas ruedan por sus mejillas y aprieta con fuerza los barrotes de la cabecera de la cama, ambos llegan a su punto máximo, el semen de Duo se estrella contra la pared y comienza a escurrirse y Heero llena nuevamente a Duo con su esencia, ésta vez se sale al terminar de eyacular, parte del semen de Heero comienza a salirse de Duo cuando él está fuera y el trenzado suspira aliviado al sentir a Heero fuera

Heero. ¿Él también se ha ido?
Duo. Sí, completamente

Ambos chicos estaban sudando mucho y sus respiraciones no daban a más, parecía que el corazón se les saldría del pecho, Duo se deja caer sentado en la cama emitiendo un jadeo al sentir dolor por la acción, Heero en cambio se deja caer de espalda acostándose

Heero. Aún no
Duo. Heero ¿me perdonarás cuando hayas borrado a Quatre?
Heero. ...

Heero no contesta a la pregunta y Duo no vuelve a hacerla, ambos estaban descansando un poco antes del final, Duo se deja caer a la cama acostándose al igual que Heero, el chico de ojos cobalto lo mira de reojo por varios segundos, nuevamente se acerca a él y subiéndose a su cuerpo comienza a besarlo tiernamente, Duo contesta irremediablemente, hacía mucho que no sentía los labios de Heero de forma tierna, cuando terminan de besarse Heero observa fijamente a Duo acariciando su mejilla de forma tierna

Heero. ¿Cómo fue con Quatre?
Duo. Heero...
Heero. Tal vez tierno, tal vez apasionado... ¿pensaste en mí?
Duo. ...
Heero. ¿Con Wufei y Trowa tampoco pensaste en mí?
Duo. Heero ya no hables de eso
Heero. Necesito saber que te dieron ellos que conmigo te hizo falta
Duo. No lo hay, tú siempre me diste todo
Heero. Tal vez no fue lo suficientemente bueno en la cama o tal vez...
Duo. ¡No, escucha! Eres perfecto ¿sí? Me haces el amor con ternura, también me lo haces con pasión, me lo has hecho con violencia, me has hecho el amor de mil formas y yo he amado todas y cada una de esas formas... ¿hasta cuándo entenderás que quien se equivocó fui yo?
Heero. Hasta que esté seguro de que no te hace falta nada, hasta que tenga la certeza de que no lo volverás a hacer
Duo. ¿Por qué habría de hacerlo una cuarta vez?
Heero. Por costumbre...

Duo siente un escalofrío por todo el cuerpo al escuchar a Heero, ahora tenía la certeza de que aunque Heero lo perdonará tal vez nunca iba a olvidar lo que había pasado y que muy seguramente Heero jamás iba a confiar en él, aunque no había matado en Heero el amor por él si había matado la confianza, ahora Heero siempre traería en mente el engaño de Duo y siempre iba a vivir con la incertidumbre de que tal vez Duo en los momentos que no estuviera a su lado estaría con otro, entregándose completamente, no pensando en él, disfrutando de simple sexo sin amor y después arrepintiéndose tan solo para cometer el mismo error una y otra vez...

FIN

Notas de Autor: ¡Hola! Por fin termina ésta historia ¿qué les pareció? A mí en lo personal me gusta mucho el tema de la infidelidad, me parece que detrás de todo engaño siempre hay un trasfondo y en ésta historia quise meter a Duo en un drama muy personal, me parece que siempre en los fics metemos a los chicos Gundam como muchachos muy listos para una relación sentimental sin hacer caso a lo que vivieron desde niños, es muy difícil entrar en una etapa de nuestra vida sin haber pasado por otra y siempre suele haber mucha confusión, y bueno, esto se aplica a los fics que no son Universos Alternos, claro está, pero espero de todo corazón que se haya entendido el mensaje así como espero que les haya gustado la historia, y si no ya saben que las mentadas de madre no me molestan, a veces sirven también para aprender y crecer, así que yo espero sus comentarios, buenos o malos, gracias y hasta la próxima, cuídense


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